El senador Rafael Filizzola denuncia filtración de exámenes, errores de corrección y un cupo del 20% para mujeres en el ingreso policial, en un proceso cuestionado por discriminación.



La denuncia del senador Rafael Filizzola volvió a colocar bajo tensión el concurso de ingreso al Colegio de Policía. El legislador afirmó que el proceso presenta irregularidades que afectan de manera directa a las aspirantes mujeres y que incluyen un cupo restrictivo del 20%, la filtración anticipada de exámenes a postulantes varones y fallas en la corrección de pruebas realizadas por mujeres. Según explicó, estas prácticas vulneran normas constitucionales y leyes vigentes en materia de igualdad.

El senador mostró copias de los exámenes presuntamente filtrados y señaló que el contenido circuló antes de la prueba aplicada a los varones. Ellos rindieron el miércoles, mientras que las mujeres fueron convocadas recién el sábado por la noche a través de anuncios en redes de Isepol. La nueva fecha fijada para ellas fue el martes siguiente, en un esquema que el legislador considera discriminatorio desde su diseño.

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Además, Filizzola pidió a las autoridades que cesen de justificar el proceso como un “criterio de méritos”. Aseguró que el mecanismo actual deteriora la institucionalidad policial. Reclamó la anulación del concurso y recordó que la Constitución exige igualdad de condiciones en el acceso a cargos públicos. Según dijo, el modelo aplicado profundiza brechas y afecta la credibilidad de la formación policial.

El legislador también afirmó que el Centro de Cómputos detectó errores en la corrección de pruebas rendidas por mujeres. Los propios postulantes debieron pagar para solicitar la verificación, pese a que la falla habría surgido dentro de la institución. Para el senador, no existe justificación para trasladar ese costo a estudiantes que acudieron al examen bajo reglas definidas por la propia autoridad.

La denuncia también alcanza al cupo impuesto a las mujeres. Filizzola explicó que solo 900 de las 5.000 plazas habilitadas fueron abiertas para aspirantes femeninas. Esto representa un margen del 20%, que —según dijo— infringe la Constitución, la Ley de Reforma Policial y la normativa contra la discriminación. Además, advirtió que limitar el ingreso desde el inicio restringe toda la carrera profesional.

En las semanas previas, la abogada Diana Vargas también cuestionó el proceso. La especialista en derechos humanos señaló que la Policía separó a mujeres y varones para rendir el examen de admisión sin base reglamentaria. Recordó que nunca antes existió un esquema diferenciado y que esta vez no se garantizó igualdad de condiciones para las postulantes.

Además, Vargas afirmó que la separación no responde a criterios logísticos. Aseguró que la medida funciona como un mecanismo para evitar que mujeres y varones compitan en igualdad. También denunció la ausencia de controles externos durante la evaluación, pese a que la Defensoría del Pueblo integra la Comisión de Admisión y debía supervisar el proceso.

Las críticas coinciden en que el concurso presenta elementos que afectan la transparencia institucional. Tanto Filizzola como Vargas advierten que el esquema aplicado genera sospechas de direccionamiento y vulnera derechos de acceso a la función pública. Para ambos, la única salida es anular el proceso y convocar a un nuevo concurso que garantice igualdad, legalidad y supervisión efectiva.

Fuentes: El Nacional/Última Hora


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