La ministra Teresa Barán asegura que no trató su continuidad con el presidente, pese a que Honor Colorado insiste en su destitución.
La ministra de Salud Pública, Teresa Barán, aseguró que no mantuvo ninguna conversación con el presidente Santiago Peña sobre su continuidad al frente de la cartera sanitaria. A pesar de los crecientes rumores y presiones desde el oficialismo cartista, la titular de Salud afirmó que su cargo “siempre está a disposición”.
“Somos servidores públicos y vamos a trabajar hasta que se diga basta. No tuve ninguna conversación con el presidente”, expresó Barán, al ser consultada por los medios.
Las especulaciones sobre un posible cambio en el Gabinete Nacional tienen como blanco principal a Barán, quien si bien mantiene una relación cercana con el mandatario, enfrenta fuertes críticas desde el mismo movimiento Honor Colorado. Varios senadores del oficialismo le habrían transmitido a Peña la necesidad de renovar su equipo de ministros.
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El propio presidente Peña ha reconocido públicamente, en dos ocasiones, que el sistema de salud pública es una de las mayores deudas de su gestión. Esta autocrítica, manifestada primero en el seno del Partido Colorado y luego ante el Congreso, fue interpretada como una señal interna sobre posibles ajustes en su gabinete.
Uno de los cuestionamientos más duros provino del senador cartista Silvio “Beto” Ovelar, quien calificó la gestión de Barán como ineficiente. “No quiero entrar en honduras porque yo formo parte de un Gobierno. El presidente tiene la lapicera y creo que mi deber, como amigo del presidente, es apuntar las deficiencias que yo creo que veo”, declaró.
Fuente: ÚH