Una fiesta con luces, música internacional y glamour político. Así celebró su cumpleaños la diputada Johana Vega, quien volvió a llamar la atención por su estilo ostentoso y las inconsistencias entre su vida pública y su declaración patrimonial.
Una fiesta con luces, música internacional y glamour político. Así celebró su cumpleaños la diputada Johana Vega, quien volvió a llamar la atención por su estilo ostentoso y las inconsistencias entre su vida pública y su declaración patrimonial.
El evento, realizado en Mariano Roque Alonso, incluyó un show de la banda mexicana Azteka, vajillería personalizada y decenas de invitados. Mientras tanto, en redes sociales, la legisladora optó por mostrar solo una acción solidaria: una entrega de tortas a comedores comunitarios.
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Sin embargo, los números hablan por sí solos. Según su declaración jurada presentada en 2023, Vega reportó un patrimonio neto de G. 2.141 millones, una vivienda valuada en G. 1.000 millones y una camioneta aún en cuotas. Además, declaró joyas por G. 200 millones, electrodomésticos por G. 100 millones y obras de arte por G. 5 millones.
Sus ingresos como diputada rondan los G. 40 millones mensuales, con gastos declarados de G. 13 millones. No obstante, su estilo de vida —vestidos de diseñador, bufandas Burberry y carteras Carolina Herrera— parece superar con creces las cifras registradas. En su informe incluso aseguró gastar solo G. 1 millón mensual en vestimenta, un monto que contrasta con las prendas que luce públicamente.

Por su parte, su pareja, el presidente de Petropar, Eddie Ramón Jara, también aparece en el radar de los interrogantes patrimoniales. En su última declaración, presentada en 2023, informó ingresos mensuales por G. 87 millones, incluyendo su salario estatal, docencia y cobros de intereses. A eso se suman G. 156 millones anuales por aguinaldos, gratificaciones y alquileres.

Jara declaró un patrimonio neto superior a G. 7.000 millones, con bienes de arte valuados en G. 350 millones, joyas por G. 95 millones y dos camionetas que en conjunto superan los G. 400 millones. Pero, paradójicamente, afirmó tener apenas G. 24 millones en el banco, mientras mantiene deudas por G. 1.162 millones distribuidas entre tarjetas de crédito, bancos y cooperativas.
El dato más llamativo: el titular de Petropar aseguró tener dos millonarias cuentas a cobrar, una por G. 2.800 millones y otra por G. 700 millones. Un escenario que, sumado a su elevado nivel de endeudamiento, despierta sospechas sobre la consistencia de su patrimonio.
Fuente: ABC Color