El ministro de Industria y Comercio dijo que, tras el acuerdo alcanzado ayer con cañicultores que llevaban semanas movilizados en Mauricio J. Troche exigiendo la culminación del nuevo tren de molienda de la planta productora de alcohol de Petropar, se debe analizar cómo lograr mejorar a mediano y largo plazo la eficiencia del ingenio estatal. Habló de asistencia tecnológica a los productores de caña y la posibilidad de dar más participación al sector privado.
En comunicación con ABC Cardinal este jueves, el ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, celebró el acuerdo alcanzado ayer entre el gobierno y productores de caña de azúcar que llevaban semanas realizando cierres intermitentes de la Ruta PY02, en el marco de una huelga por medio de la cual exigían la culminación de la construcción de un nuevo tren de molienda en la planta alcoholera de Petróleos Paraguayos (Petropar) en la ciudad de Mauricio José Troche.
Ayer, luego de 17 días de medida de fuerza de los cañicultores, estos llegaron a un acuerdo con el gobierno por medio del cual la empresa estatal Petropar promete realizar un nuevo llamado a licitación para la construcción del tren de molienda, luego de que el proyecto original fuera abandonado por la empresa adjudicada, entre otros compromisos.
Alcanzado ese acuerdo, los cañicultores accedieron a levantar su huelga y despejar definitivamente la Ruta PY02.
El acuerdo

El ministro Giménez celebró que ambas partes llegaran a un acuerdo “que vuelve a restituir el orden público y la seguridad” luego de “momentos de tensión”.
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Según el acuerdo suscrito ayer, el nuevo tren de molienda debe estar terminado y operando para septiembre de 2026. Petropar prometió también comprar la caña de azúcar disponible – para la producción de alcohol – al precio actualmente vigente de 266.500 guaraníes por tonelada.
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El ministro dijo que el gobierno debe trabajar en brindar asistencia a los productores que permita mejorar el rendimiento y los volúmenes de producción, además de mejorar la eficiencia y productividad de la planta de Troche.
“(Los cañicultores) tienen las ganas, tienen las tierras, la producción se puede llevar si asistimos a estas personas. No podemos dejarlas desamparadas en el uso de la tecnología, nuevos fertilizantes, semillas, flete, una serie de cosas que hacen al rendimiento”, dijo.
Contrato suspendido por incumplimientos
Agregó que el acuerdo alcanzado ayer fue “una aceleración de una decisión técnica ya evaluada” y explicó que el gobierno y Petropar ya tenían planeado el nuevo llamado a licitación para la construcción del tren de molienda.
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Originalmente, la construcción del nuevo tren de moliendas fue adjudicada en 2021 a la empresa Estructura Ingeniería S.A. (EISA) por más de 198.000 millones de guaraníes.
La suspensión del contrato en 2023 por supuestos incumplimientos de la empresa dejó a la planta estatal con capacidad reducida para procesar solo 350.000 toneladas de caña por año, lo que provocó la pérdida de más de 450.000 toneladas de materia prima. El ministro Giménez indicó que el contrato con EISA está en “vía de cancelación” y que se hizo una denuncia penal innominada.
Dar mayor participación al sector privado

Si bien el nuevo llamado a licitación ofrece una solución al problema en el corto plazo, el ministro argumentó que deben analizarse soluciones a mediano y largo plazo para garantizar la eficiencia de la planta alcoholera de Troche, y opinó que el camino no solo para Petropar, sino para “todas las empresas públicas, sobre todo las deficitarias”, puede ser “darle mayor participación” al sector privado.
“Para mí la salida es invitar al capital privado en modelos de concesión o alianza público-privada”, subrayó. “Una empresa privada se maneja mucho más ágilmente que un Estado que muchas veces peca de burocrático y eso se traslada a los costos”.
Agregó que con la solución a corto plazo del problema en Troche se puede pensar “un poco más estratégicamente” en el futuro.